El Gobierno de la Ciudad despide trabajadores arbitrariamente, empeora la situación habitacional y veta un proyecto para recuperar la identidad de hijos secuestrados durante la Dictadura Militar. Duras críticas de legisladores de Proyecto Sur a una de las gestiones más impopulares, represivas e ineficaces de los últimos años porteños.
Trabajadores despedidos. “Macri no se enteró que tuvo 2 años a Ciro James haciendo espionaje, pero persigue y despide arbitrariamente a los trabajadores”, aseguró el presidente del Bloque Proyecto Sur y Secretario General de CTA-Capital, Fabio Basteiro, en conferencia de prensa, junto a organizaciones sociales, sindicales y bloques legislativos de la oposición porteña, donde denunciaron los despidos que está efectuando el gobierno de la Ciudad.
El conflicto comenzó cuando las autoridades porteñas informaron que rescindirían los contratos de 500 trabajadores y echarían a otros 500 que figuraban como empleados de planta permanente.
“Desde que asumió el Gobierno de la Ciudad, Macri implementó múltiples mecanismos con el objetivo de legalizar despidos. El modelo llevado adelante por esta gestión tiende a retrotraernos a las épocas del achicamiento del Estado a costa de los trabajadores y en favor de los negociados privados de unos pocos”, denunciaron.
Asimismo, el legislador Jorge Selser (PSA), quien acompañó el reclamo de trabajadores en el Hospital Durand, donde hubo 22 cesanteados, aseguró que "esta medida viene a completar la política salvaje que Macri lleva adelante en todas las áreas sociales: salud, vivienda, educación, desarrollo social y cultura". Al referirse a la situación de la salud en la ciudad, Selser dijo que el gobierno porteño “está destruyendo lo único que nos queda, que es el recurso humano" y criticó el “terrible deterioro” en los hospitales de salud mental.
En tanto, Basteiro aseguró que el próximo este lunes van a realizar un plenario de la CTA para la elaboración de un plan de acción. En tanto, en la Legislatura convocó a "ampliar los niveles de unidad para frenar la embestida macrista”.
Sin lugar para los pobres. Ante la renuncia del presidente del Instituto de la Vivienda de la Ciudad, Roberto Apelbaum, los legisladores del Movimiento Proyecto Sur denunciaran el estado crítico de la situación habitacional en la Ciudad, y remarcaron que "la renuncia de Apelbaum es una muestra más de la ineficiencia de Macri, la ausencia de políticas de vivienda dirigidas a los sectores más desprotegidos y la búsqueda constante del negocio inmobiliario".
Las criticas se hicieron durante un encuentro sobre la problemática de la vivienda porteña, realizado en el Salón Montevideo de la Legislatura junto a dirigentes de Movimiento de Ocupantes e Inquilinos (MOI-CTA), y del Centro Comunitario "La Casa" de Parque Avellaneda, integrado por 40 familias que se encuentran en riesgo de desalojo.
Basteiro también destacó que "Macri está desarrollando una política sistemática de transferencia de recursos al capital privado inmobiliario, no tiene respuestas ni soluciones a los graves problemas de vivienda y continúan los desalojos".
Luego de dar la palabra para que los habitantes del Centro Comunitario "La casa" contaran su experiencia, Fabio Basteiro enfatizó: "La casa es un ejemplo de la pelea que estamos dando junto con los vecinos y los movimientos sociales, buscando soluciones racionales, inteligentes, conformando cooperativas de vivienda y fundamentalmente frenando los desalojos"
La identidad no es PRO. La Asociación Abuelas de Plaza de Mayo denunció que el gobierno macrista vetó una ley que disponía la creación de un Fondo para la localización y restitución de niños secuestrados y nacidos en cautiverio durante la Última Dictadura. Este Fondo es de suma importancia para el desarrollo de la tarea de Abuelas, además de representar un porcentaje significativamente bajo del presupuesto de la Ciudad.
Las Abuelas aseguran que la gestión macrista va en contra del artículo 12 de la legislación porteña sobre Derechos Humanos, que establece que “La ciudad garantiza el derecho a la identidad de las personas” y que “Debe facilitarse la búsqueda e identificación de aquellos a quienes les hubiera sido suprimida o alterada su identidad”.
Si bien Macri aclaró que “su gestión apoya y garantiza” las actividad de Abuelas y “la búsqueda de niños y niñas secuestrados o nacidos en cautiverio con el fin de lograr la restitución de su verdadera identidad”, desde la entidad que preside María Estela de Carlotto, esperan que la Legislatura insista en la creación de este fondo “para que los más de 300 jóvenes que viven con su identidad falseada puedan lograr su libertad.”
Pistolitas picaneras. “Si se atreve, que Macri pruebe las Taser en su propio cuerpo”, respondió el legislador porteño del Movimiento Proyecto Sur Rafael Gentili, a Macri, quien había declarado que quienes se oponen al uso de las armas de descarga eléctrica por parte de la Policía Metropolitana lo hacen por “ignorancia o prejuicio”.
“En lugar de llamarnos ignorantes y prejuiciosos, Macri podría probar en su propio cuerpo los efectos de un arma que fue catalogada como elemento de tortura por la ONU”, afirmó Gentili.
Respecto al argumento del Jefe de Gobierno de que se usa en varios países del mundo, el legislador explicó que “Macri no mencionó que en Francia los pocos efectivos policiales autorizados a portar las Taser están obligados a probarlas en carne propia, y que incluso políticos de ese país se han prestado a esas pruebas.”
En tanto, el legislador Adrián Camps (PSA en Proyecto Sur), dijo en el gobierno porteño "mienten cuando dicen que las Taser son armas no letales. En Estados Unidos han causado la muerte de más de 300 personas, Canadá restringió su uso debido a los fallecimientos que produjeron y fue prohibida en ciento de naciones, sobre todo europeas".
Por Fracisco García Dietze - InfoSUR
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